CETINA 'NO REBLA' EN DEFENSA DEL TREN QUE VERTEBRA EL ALTO JALÓN

Un primer domingo de mes más y de nuevo, Cetina vuelve a ser prácticamente la única localidad del Alto Jalón donde se han secundado las protestas en defensa del ferrrocarril como eje vertebrador del mundo rural. Las manifestaciones, convocadas por la plataforma vecinal aragonesa 'No pierdas tu tren', están sufriendo un importante desgaste en todas las localidades de ambas vertientes de nuestra comarca, menos en Cetina, donde 'no reblan' en la lucha y la estación, lejos de presentar un aspecto vacío, aparece casi con mayor número de manifestantes en cada una de las convocatorias.

"Aquí en Cetina hay gente joven que los domingos se marcha en el tren a Zaragoza y también hay matrimonios jubilados que lo utilizan para ir y venir a Zaragoza", nos cuenta Maria Luisa, una de las habituales de las protestas de cada primer domingo de mes en Cetina, como uno de los principales motivos para que la convocatoria tenga éxito. Convencidos y convencidas de que "hasta Calatayud es fácil que mantengan todo, pero por esta zona o lo peleamos o nos quedamos sin nada", cetineras y cetineros salen a su estación al paso del ferrocarril provistos de pancartas sin fallar ni un solo primer domingo de mes. "Durante la semana que tenemos que ir a manifestarnos, lo vamos poniendo en el grupo de WhatsApp", nos cuenta Maria Luisa señalando que "lo movemos a través del grupo que tenemos la Asociación de Mujeres".

Ibon fue el único manifestante ayer en Ariza.

En el resto de estaciones de Alto Jalón, como en Arcos de Jalón, Medinaceli, Alhama de Aragón o Ariza, los andenes permanecieron vacíos este domingo al paso del tren en el que deberían producirse las manifestaciones. En las redes sociales incluso se hacían denuncias en tono de humor con el aspecto que presentaban estaciones como la de Ariza, donde tan solo un perro, Ibon, y su dueña, se presentaron a la hora indicada por los convocantes. Sin embargo, una estación antes, Cetina sí que había mostrado su lado reivindicativo. "No hacemos nada especial, casi siempre somos los mismos", indica Maria Luisa, sin explicarse demasiado por qué en el resto de pueblos vecinos no se suman a la lucha como ellos al grito de "queremos tren".